Selena Gómez reconoce el peligro de las redes sociales

Selena Marie Gómez inició su carrera cuando apenas contaba con diez años y, tras más de dos décadas viviendo delante de los focos, Selena Gómez se ha convertido en todo un icono y referente para millones de jóvenes en todo el mundo.

A pesar de padecer Lupus, enfermedad por la que tuvo que someterse a un trasplante de riñón en 2017; una situación que hizo peligrar su estado de salud mental, lo que hizo que se sincerara con sus seguidores sobre la adicción a las redes sociales, depresión y la ansiedad que estaba padeciendo.

“Llegó un punto en el que Instagram se convirtió en todo mi mundo, y eso era muy peligroso”

Recuerda, “Tomarme un descanso de las redes sociales fue la mejor decisión que jamás he podido tomar por mi salud mental”.

Selena llega a confesar que al cumplir los veinte años, en un momento en el que era una de las jóvenes más envidiadas del planeta, no se sentía “suficiente”, “no me sentía guapa».

Hubo una etapa en mi vida en la que pensaba que necesitaba maquillaje y nunca quería ser vista sin él.

La joven asegura que tomar control de su vida y madurar le ha hecho ver el camino para encontrar la felicidad, y no es precisamente dependiente de unos cuantos “me gusta” en Instagram:
Desde entonces, la joven ha pasado su tiempo seleccionando muy bien los proyectos en los que participa, y compaginándolos con el lanzamiento de diversas iniciativas relacionadas con el cuidado de la salud mental. Mental Health 101, que presentó con su marca de belleza Rare Beauty para educar sobre la salud mental y, más recientemente y en compañía de su madre, Mandy Teefy, la plataforma Wondermind.